miércoles, 30 de septiembre de 2015

CAPÍTULO 14: Llanto lloro

1995.

-Estás bien? – dice asustado mientras salgo de la enfermería –

-Si… solo se me ha reventado la nariz… - sonrío amargamente –

-Joder… me ha asustado toda esa sangre… - habla atropelladamente –

-Eso me pasa por cruzarme mientras jugáis…

-Yo no he…

-Que ya sé que no has sido tú… - digo cortándole –

-Como… como lo sabes? – pregunta contrariado –

-Porque tú no me harías daño… y porque nunca me mientes…

2010.

-Dónde está Álex? Qué ha pasado? – dice mi madre nerviosa al ver entrar a Vero y Jose con gesto serio –

-Pregúntale a la loca de tu amiga – dice mirándome – se ha puesto a increparle, a decirle que había sido él el que te había hecho esto – resopla furioso – delante de la policía joder!

-Y yo qué sabía? Todo cuadraba! – dice Vero excusándose –

-Quieres dejar ese tono de comisario de policía? No te pega nada… - resopla caminando hacia la ventana – la policía había comprobado por protocolo el coche de Álex… que es blanco, te enteras? – grita a Vero – y la pintura del coche de mi hermana es azul joder! Que no ha sido él! Pero tú, en vez de preguntar, has decidido acusarle delante de la policía…

-Qué? – exclamo perpleja – has hecho eso Vero?

-Joder… - resopla – que pensaba que había sido él vale? Lo siento, le llamaré y me disculparé…

-Y se ha ido molesto con toda la razón… - dice Jose – y veremos a ver si esto no hace que estemos otros 12 años sin verle después de lo bien que se ha portado joder…

-Se ha ido? – pregunto sintiendo miedo de repente –

-Pues claro que se ha ido Malú… tu no te irías si una loca te acusa de querer matar a su amiga sin ninguna prueba?... es que es de película… - niega con la cabeza apoyándose en la ventana –

-Que ya he dicho que lo siento joder… - se excusa Vero – pero no me negaréis que todos pensabais igual cuando yo lo he dicho…

-Eres imposible tía… imposible… - reniega mi hermano antes de salir de la habitación –

-De verdad has hecho eso? – pregunto mirando a Vero –

-Lo… lo siento Malú…

-Lo sientes? – digo un tanto enfadada – le has culpado de intentar matarme cuando lo que ha hecho es salvarme la vida?... – resoplo –

-No me lo puedo creer… es que no aprendes! – grita mi madre – que antes hay que pensar Vero, que te lo tengo dicho…

-Dejadme sola queréis? – digo notando una tristeza inmensa de repente –

-Pero hija…

-Que me dejéis sola! – grito – acabo de sobrevivir a un accidente y lo único que se os ocurre es jugar a detectives y a pegar gritos en mi habitación… salid de aquí ahora mismo…

-Malú… - dice Vero intentando calmarme –

-Fuera! – exclamo furiosa –

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