martes, 29 de septiembre de 2015

CAPÍTULO 13: Y ahora vete

1995.

-Ha sido él – me señala al ver a Malú en el suelo –

-Eh gilipollas, yo no he sido – digo ofendido mientras intento que se levante del suelo –

-Que si, que ha chutado él

-Malú, estás bien? – digo sin hacerle caso –

-Ha sido él eh? Que lo he visto – sigue acusándome –

-Malú, yo no he sido, te lo prometo… - digo mientras me mira intentando reponerse del balonazo –

-Ya sé que no has sido tú… - sonríe mientras se levanta todavía dolorida – nunca me harías daño…


2010.

-Bien, disculpe las molestias señor Ramirez… pero es el protocolo que debemos seguir.

-Sin problema, no pasa nada… - contesto cortésmente –

-Seguiremos buscando al conductor que se dio a la fuga…

-Ya sabía yo que estabas implicado… - una voz de mujer me hace girarme sorprendido – ha sido él verdad?

-Cómo? – pregunto estupefacto –

-Señorita, cálmese… - le contesta uno de los agentes –

-Cómo voy a calmarme? Cómo te has atrevido a estar ahí dentro, viendo como una familia sufre por tu culpa? Y le traes flores? Después de haber estado a punto de matarla? – grita descontrolada acercándose a mí –

En ese momento, llega Jose por detrás y la sujeta. Venía hacia mí, dispuesta a… pegarme? Está loca? Quién cojones es esta tía?

-Deténgale! Casi mata a mi amiga y viene aquí a que? A limpiar tu conciencia pedazo de cabrón? – intenta revolverse sujeta entre los brazos de Jose –

-Vero por Dios, cálmate! – le grita –

-Señorita, no vamos a detener a nadie… - contesta un agente contrariado –

-Como que no? Si estarán las manchas de pintura en su coche! Compruébenlo! – grita hacia el agente –

-Ya lo hemos hecho! – grita el agente – el coche del señor Ramirez es blanco y la pintura que aparece en el lateral de la señorita Sanchez es azul oscuro, justo concuerda con la descripción que nos ha dado el señor Ramírez… - resopla – deje de hacer este espectáculo, tenemos que seguir trabajando…

El agente que le ha gritado a Vero se da la vuelta perplejo y empieza a andar, mientras el otro agente se dirige a mí. Mientras tanto, Vero deja de patalear, mirando contrariada hacia los policías mientras Jose observa la escena un tanto avergonzado.

-Disculpe señor Ramirez… - me hace un gesto y mira hacia Vero con cara de pocos amigos justo antes de darse la vuelta y volver a su coche patrulla –

-Joder Vero… estás loca o qué? – le recrimina Jose soltándola – Álex, siento mucho…

-De verdad pensabais que había sido yo? – digo tremendamente dolido –

-No… claro que no… - se acerca a mí – vamos tío… ha sido un malentendido… - pone su mano en mi hombro –

-De verdad piensas que soy capaz de hacerle algo así a tu hermana? – me aparto dejándole sorprendido –

-No nos cuadraba nada, vienes aquí super dispuesto, intentando ayudarnos, parecía como que te sentías culpable por algo y lo hemos estado hablando y…

-Cállate Vero! – le recrimina Jose – tío, esto no ha sido cosa mía, de verdad, vuelve dentro, hablamos y…

-No… - digo mirándole entristecido – nunca le haría daño a tu hermana…

-Qué? – me mira algo asustado al ver que camino hacia el coche – claro que no, pero si sois amigos… joder Álex! – grita al verme abrir la puerta –

-Espero que Malú se recupere pronto vale?

Estoy muy dolido. No estoy dispuesto a volver al hospital como si nada después de haberme acusado de haber intentado… matarla? Matar yo a Malú? Hacerle daño? Joder, no me lo puedo creer.

-Espera, Álex! – cierro la puerta del coche – Álex, sal del coche tío, esto no es así, no te enfades, ha sido un malentendido… - le miro y me entran unas ganas de llorar tremendas, pero pongo el coche en marcha – baja la ventanilla, por favor… - suspiro y la bajo –

-Jose, no voy a volver ahí dentro sabiendo que sospechabais de mí… lo entiendes no? – digo intentando mantener la tranquilidad –

-Pero Álex, que nadie ha sospechado de ti, que esto ha sido una confusión…



-Una confusión? – resoplo cabreado y apago el motor – una confusión? – abro la puerta y bajo del coche – ni siquiera sé quién eres – me dirijo a la chica que me ha increpado – pero conozco a Malú desde que teníamos 4 años… y si te parece que me he excedido quedándome en el hospital para ver como está una amiga de la infancia que ha tenido un accidente de coche que yo he presenciado, lo siento de verdad! – grito irónico abriendo los brazos – sabes lo que habrá pensado la policía? Sabes en el lío que me has podido meter sin tener una jodida prueba? – va a hablar pero no le dejo – No he hecho nada! Solo he intentado que Malú estuviera bien, y lo siento si te molesta, no volverá a ocurrir.

Tras quedarme agusto, vuelvo a meterme en el coche.

-Álex tío, no te vayas… qué le voy a decir a mi hermana eh? – grita golpeando el cristal – Álex! – le miro para que se aparte y lo hace a regañadientes – Álex joder, lo siento! – miro por el retrovisor y le veo alzar las manos – Álex!

Decido no escuchar una palabra más y salgo de allí como alma que lleva el diablo. Justo al perder de vista el hospital, siento unas ganas de llorar que no puedo frenar. Mi mejor amiga de la infancia y su familia, con la que compartí tantas cosas de pequeño, con los que crecí… esos mismos han creído que yo sería capaz de hacer algo así. No me lo puedo creer. No es justo. No me lo merezco. Y no pienso volver a un sitio donde no soy bienvenido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario